PLANISFERIO
2018
2018
Encontré un libro por azar que había sido colonizado por termitas: “Estampas de ciudades” de Eduardo Aunos. Las termitas socavaron las páginas creando nuevas geografías; su propio territorio. Me percato que las páginas de la derecha reflejan las figuras socavadas de las páginas del costado izquierdo; veo una simetría bilateral semejante al test de Rorschard. “Planisferio” busca establecer nexos entre la palabra del título del libro encontrado ¨estampas¨, sinónimo de marcar, y el test de Rorschard. Aquí se entrelazan las muchas posibilidades de “ser” con el efecto espejo para así, cuestionar el estatuto de la imagen como realidad de mundo. Formulo preguntas acerca de aquella “otredad” a la que se refería M. Foucault cuando dio su conferencia acerca de los ¨espacios otros¨ o heterotopías. Busco reconocer que existen espacios que se desdoblan con la llegada de la noche, reconocer que la cuadrícula espacial de la urbe se duplica en un tejido de hierro impidiendo la libertad, o que en la preferencia sexual de unos se reconoce la existencia del espacio como resultado de la producción de la subjetividad en constante mutación. Basta con admitir que la ciudad posmoderna extiende sus fronteras más allá del límite geográfico para comprenderse como un archipiélago de microcosmos privados e interconectados por varias redes. Hallo relaciones de vecindad binaria y la yuxtapongo para producir conocimiento al problematizar el orden y el espacio en la sociedad globalizada. En Planisferio aparecen el espejo y el internet como heterotopías que devienen eje conceptual y soporte para la ejecución de este proyecto, a partir de una pequeña comunidad de termitas que toman el libro como su alimento y mundo, las sostiene, las produce y les es territorio.
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